Principales ideas presentadas:

▶ En el panorama normativo de las modificaciones
relacionadas con el impuesto sobre la renta de personas
jurídicas, el principal impuesto que deben pagar las
empresas, estuvo compuesto en 2020 por la Ley 2010
(que reemplazó la Ley 1943 de 2018, declarada
inconstitucional), por los decretos reglamentarios
expedidos en el marco de la emergencia y por las leyes
2068 y 2069.

▶ La reforma tributaria es necesaria por el importante
déficit fiscal generado por la pandemia; hay urgencia
de ampliar la base del recaudo. Además, las altas cifras
de desempleo y los índices de pobreza crecientes hacen
que sea necesaria una redistribución de los recursos en
la sociedad, herramienta que se logra también por
medio de las reformas tributarias.

▶ Respecto a la calificación de riesgo país, puede ser
cuestionado por las calificadoras de riesgo y se necesita
encontrar un equilibrio para mantener esa calificación.
La comisión de expertos no se ha pronunciado; el
ministro de Hacienda y el director de la DIAN han
manifestado no querer tocar a las empresas. Dicen que
no son el foco principal del recaudo porque vienen de
una situación complicada, por lo que no es viable
aumentar la carga tributaria. ¿Qué queda en la mano?
El IVA como fuente importante de recaudo y
contribución de las personas naturales.