Las industrias creativas y culturales engloban una amplia gama de sectores, como el cine, la música, las artes visuales, el diseño, la publicidad, el turismo cultural, la moda, entre otros. En la era digital, estas industrias han experimentado una transformación significativa en la forma en que se producen, distribuyen y consumen productos y servicios culturales.

El entorno digital ha abierto un mundo de posibilidades en términos de alcance global, interacción con audiencias y personalización de experiencias. Las plataformas en línea, las redes sociales y los servicios de streaming han democratizado la distribución, permitiendo a los artistas y creadores llegar a audiencias más amplias sin las restricciones tradicionales de la distribución física.