Para el segundo trimestre de 2023, las cifras del DANE reportaron un crecimiento real en el PIB nacional de 0,3 % respecto al mismo período en 2022. Si bien hay un efecto de base, al tener como punto de comparación una economía que creció por encima de 12 % en el segundo trimestre del año anterior, la variación anual registrada es una de las menores que se han observado en el país desde 2009 y son reflejo claro de una desaceleración. El bajo dinamismo de la coyuntura reciente también se puede ver desde el enfoque del gasto, con una demanda interna que decreció 3,9 %, afectada por caídas en la inversión privada (variación de -8 % en el indicador de formación de capital fijo) y una ralentización progresiva en el gasto de consumo final de los hogares.